Esta revolución llegó a partir de la muerte del hermano de Íñigo, Bernardino, quien moría sin descendencia y por lo que recaía el titulo de Condestable y Duque de Frías, con todas sus rentas, entre ellas los diezmos del mar, sobre Íñigo.
Entre otros hechos el Condestable Íñigo por encargo de Carlos I custodió a los hijos del Rey de Francia, el Delfín y el Duque de Orleans, quienes pasaron un tiempo en Berlanga, entre otros lugares del Reino.
Dejamos a continuación un artículo de Eugenio Fontaneda "Discurso de recepción de académico: "Salvar un castillo"" sobre Íñigo Fernández de Velasco y su relación con Ampudia, lugar donde en uno de sus viajes murió Maria de Tovar a los 64 años de edad (1527).
No hay comentarios:
Publicar un comentario